Un libro increíble, con una fuerte dosis de acción y romance desde el primer momento. Además, la historia avanza mucho más rápido que en ACOTAR por lo que su lectura es más amena y fácil de seguir. 

El mundo es igual de asombroso, mágico e intrigante que en la saga anteriormente mencionada. La única diferencia es que, quizás, la prosa de la autora es más sencilla y menos adornada, pero igualmente es bonita y entretenida. 

El final es muy acertado, nos deja con las ganas de continuar con el siguiente, y la trama, por la cantidad de detalles que tiene, promete. 

Me ha gustado mucho y la recomiendo encarecidamente. Las peleas y entrenamientos me recordaron a Los juegos del hambre, mientras que su triángulo amoroso entre el príncipe, el guardia y Sardothien me trajeron de vuelta los tiempos de La selección. Con esa combinación se dice todo. 

Pronto continuaré con la segunda parte, esta historia aún tiene mucho que contarme. 

Increíbles, trabajados y muy diferentes entre sí. 

Sardothien ha demostrado la astucia, poder y fuerza que tienen las mujeres entrenadas, quienes pueden ser perfectamente mejores que algunos hombres, a la vez que nos ha abierto una brecha al por qué de su oficio como asesina a sueldo. No me parece algo que justificar, matar nunca es justificable, pero ayuda a comprender que no es tan oscura como parece. Los traumas de la infancia nunca deben servir como excusa para el abuso de los demás, pero no siento que la autora lo esté usando como pretexto; simplemente expone la realidad: sabe asesinar, sí, pero tiene sus propias normas respecto a esto, aunque siga siendo algo horrible. 

Por otro lado, Chaol es mi favorito. Dorian también me cae bien, pero a veces se me antoja un poco niñato por lo que el capitán se lleva mi corazón. Ojalá Sardothien sepa verlo pronto jsjsjsjs.

Novela fantástica con acción, magia y romances prohibidos.