Una novela sumamente dura, que engancha y no permite que te desprendas de su mensaje cuando cierras sus páginas, que me deja temblando cuando termino un capítulo.

Pese que aún no se ha dicho explícitamente la razón por la que la protagonista tartamudea y va tras Keith se puede intuir bastante y eso te destroza el corazón. Está narrado con una elegancia y una prosa punzante pero al mismo tiempo cautivadora. Es brutal.

Espero que puedan detener en algún punto a la muchacha porque solo conseguirá hacerse daño a sí misma, esos asuntos deben correr a cargo de la justicia; sin embargo, entiendo y comparto su rabia y, en cierta forma, es comprensible que si el sistema no actúa quiera hacerlo ella misma.

Nos veremos en la reseña de nuevo, tiene pinta que será una pedazo de obra de arte.

Kisses,

Myn