Partimos de la premisa de que se trata de una comedia romántica, bastante similar a una novela que leí (Myn) hace tiempo de la autora (Querida Navidad, hazme el favor), que nos presenta un enemies to lovers bien spicy. 

Los capítulos son de narración alterna, lo que le aporta un punto diverso e interesante, y son muy rápidos de leer. La trama, por su lado, sigue un hilo cómico similar a las películas de Netflix españolas, esas que contienen la esencia, el acento y los dichos del país. 

La historia tiene un toque de humor constante, escenas absurdas y surrealistas que llaman la atención, y unos personajes muy destacables en cuanto a forma de ser. Es curioso como se describen escenas mundanas y cotidianas, vistiéndolas de elementos cómicos que las convierten en entretenidas; hasta ir a la compra puede pasar a ser una gran aventura que no pasa inadvertida.

Si bien es cierto que la narración roza el sarcasmo, hay ciertas escenas que son un pelín cuestionables en cuanto a intimidad y trasfondo de los protagonistas, más que nada porque hay hechos por los que se pasa demasiado por encima, como "liadas" en las que no se termina de profundizar. 

Por el resto, está bastante bien planteado, empezando ya en el quid de la cuestión para despertar el interés del lector. La autora sabe terminar capítulos dejándote con ganas de saber más, así como va haciendo que poco a poco Masi y Rodrigo se acerquen más. 

Como conclusión podríamos decir que parece un libro interesante, de desconexión, para reír y sonrojarse, pero que aconsejamos para público adulto, uno que empatice con las separaciones, las responsabilidades y la vida independiente.